PROGRAMA DE RESPIRO
FAMILIAR
Con la reforma Psiquiátrica, la familia se ha convertido en el principal agente para los cuidados de la PCEM y la encargada de asistirle durante las veinticuatro horas del días y durante todos los días del año. La sobrecarga que supone el cuidado permanente y sin descanso de una persona con problemas de salud mental, pueda dar lugar a consecuencias tan negativas como el insomnio, repliegue social, falta de relaciones sociales, surgimiento de otros trastornos como depresión. Las familias con personas con problemas de salud mental son la base de la integración y el principal recurso para responder a las necesidades de sus miembros. La inclusión social de las personas con estos trastornos mentales sólo será posible si antes se produce papel eficaz en la toma de decisiones que afecten a sus familiares. Por ello, en la vida cotidiana de cualquiera de esas familias se dan ocasiones en las que se hace necesario buscar un espacio de respiro, de descanso y de independencia de los cuidadores principalmente.
Desde “El Timón” se plantea la necesidad de poner en marcha el proyecto de promoción de la autonomía y respiro familiar. Este programa pretende facilitar, su independencia y un espacio de tiempo y descanso. Por otro lado, también se aspira a beneficiar a las personas con algún problema de salud mental, ofreciéndoles un recurso para mejorar su autonomía y favorecer su integración en la sociedad.
Una de los proyectos que fomenta desde este programa es el de actividades de la vida diaria, ya que por diversas situaciones y circunstancias, y acompañado por el deterioro del propio trastorno, muchas de las actividades de la vida diaria y habilidades cotidianas de personas con problemas de salud mental han quedado afectadas y desmejoradas. Por ello, desde este programa se fomenta actividades dirigidas a hábitos básicos de higiene, convivencia y educación social que en muchas ocasiones hacen falta una ayuda para que estas habilidades y herramientas se aprendan y sean adaptadas a su vida diaria.